No soy una persona demasiado cinéfila pero las peliculas que me gustan por lo general son bastante raras y muchas veces yo solita las entiendo, hace un tiempo discutí este tema con un amigo y ambos estuvimos de acuerdo en que no nos sentimos atraídos por las típicas películas acción que pasan en la tele un domingo a las 3 de la tarde, mas bien lo que demanda nuestra atención son filmes con historias mas consistentes, historias reales o irreales en las cuales vemos un reflejo de nosotros mismos y que nos dejan una impresión de enseñanza cuando terminan, son esas películas que no verías por tener un póster lleno de chicas en bikini, autos, monstruos o armas de ultima generación.
Por mi parte, no tengo un genero favorito pero desde siempre me gustaron las historias llenas de fantasia como The Never Ending Story o Willow, recuerdo haberlas visto de pequeña y no importaba si la veía todos los domingos a las 11am porque me parecían simplemente geniales, también las de Tim Burton con su ternura espeluznante que hasta el día de hoy logra cautivarme o las de ciencia ficción como Bicentennial Man. Quizá siempre existió ese cliché de que a las mujeres solo nos gustaban las películas de amor, y si tal cosa existe en mi, se alimenta de las 821418562mil veces que he visto Titanic, se identifica con las locuras que puede llegar a hacer Adam Sandler en cualquier personaje por una mujer y se ha re-definido en todos sus sentidos desde la primera vez que vi La Vita é Bella.
Si mi vida fuese una pelicula seria como cualquiera de las que me gustan: un gusto adquirido, con drama, algo de acción, comedia y emoción, en fin, un filme lleno de eclecticismo...
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